Tras el nacimiento de su hija La'akea Makalapuaokalanipō Browne en septiembre de 2021, Ronda Rousey hizo un regreso triunfal a WWE ganando el Royal Rumble femenino de 2022 después de un paréntesis de casi tres años. Sin embargo, su segunda etapa con la compañía llegó a su fin en SummerSlam 2023.
Ahora está centrada en sus nuevos proyectos profesionales, y actualmente se encuentra concediendo varias entrevistas para comentar su situación actual, así como también para promocionar su nuevo libro Our Fight: A memoir. En una reciente entrevista concedida a Good Morning America, la excampeona de WWE y UFC comentó las dificultades que había tenido para compaginar el hecho de ser madre con ser una superestrella de WWE.
"No es un estilo de vida que pueda seguir siendo madre, ¿sabes? Estuve de gira 18 meses con mi bebé y no era algo que pudiéramos mantener para siempre". Con todo, parece claro que el apretado calendario de las superestrellas de WWE suponía una clara traba para la maternidad de una Ronda que, finalmente, optó por abandonar la empresa 2 años después de dar a luz.
Cabe destacar que Ronda no es la única superestrella de WWE que ha abrazado la maternidad al mismo tiempo que su carrera. Becky Lynch, que dio la bienvenida a su hija Roux con Seth Rollins en diciembre de 2020, regresó al ring en SummerSlam 2021. Además, Carmella, que sufrió un aborto involuntario anteriormente, dio a luz a su hijo en noviembre de 2023, mientras que Alexa Bliss dio la bienvenida a su hija Hendrix ese mismo mes.
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